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Aunque  nació en Uraco -pequeña localidad donde se hace cestería en coirón, Jovita Pozo lleva más de 30 años elaborando la tradicional cerámica blanca de Vichuquén. Empezó a trabajarla cuando se separó de su primer marido y quedó sola a cargo de dos hijos, entonces de 4 y 5 años. "Mi bisabuela y abuela materna también lo hacían pero yo a ellas no las conocí. Un día tomé un pedazo de greda y nunca más paré porque en cuanto salieron las piezas del horno las vendí todas".

Tiene más de cien diseños y moldes propios; ella misma extrae la arcilla de las vetas que hay en los cerros que rodean al pueblo y, en primavera, junto a su marido prepara suficiente material para tener durante el año.

Fuente www.artepopular.cl

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